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El Aula Abentofail inicia un nuevo curso con Sebastián de la Obra

Presentará la ponencia 'Sefarad: donde hay atención no hay olvido'

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Lunes, 17 de septiembre 2018

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El Aula Abentofail de Poesía y Pensamiento, la cita mensual con la cultura que desde el año 1999 se viene celebrando bajo la dirección del escritor Antonio Enrique y con la organización de la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Guadix que encabeza Beatriz Postigo Hidalgo, retoma su actividad tras el periodo estival y tiene programada ya la que será su sesión de septiembre. Como es habitual, el Aula se celebrará el último viernes del mes; en esta ocasión el día 28 de septiembre a partir de las ocho de la tarde en el patio del Ayuntamiento. Allí el público tendrá ocasión de escuchar y entablar diálogo con el historiador Sebastián de la Obra, invitado número 139 del Aula. La sesión, abierta a todo el público que desee asistir, se presenta bajo el título «Sefarad: donde hay atención no hay olvido».

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Nacido en Úbeda en 1958, es historiador, licenciado en Historia Contemporánea por la Universidad de Granada, habiendo presentado el doctorado en Ciencias de la Comunicación por la de Sevilla. Director de la Biblioteca del Parlamento de Andalucía, así como director de su Archivo y Servicio de Documentación, fue presidente de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía en 1995 y adjunto al Defensor del Pueblo de Andalucía entre 1996 y 2007. Es, asimismo, fundador de la Casa de la Memoria, ubicada en Sevilla, y bibliotecario de la Casa de Sefarad-Casa de la Memoria en Córdoba, ciudad en que habita.

Cuenta con numerosas publicaciones monográficas en opúsculos y revistas sobre exclusión social, inmigración, derechos humanos y libertades públicas, junto a la ensayística relacionada con la Historia de Andalucía, con especial incidencia en el judaísmo hispano: Bibliotecas: nota urgente para una reivindicación (1981), Esbozo de un pasado: las bibliotecas en la II República (1983), La lectura y los enfermos (1985), Diálogos de Calímaco y Eratóstenes (1990), Memorias de la Exclusión (1999), Lugares del saber: la Biblioteca Califal de Córdoba (1999), Ganivet y el agua de Granada (1998), Una ciudadanía a salvo (2000), Boceto de una presencia: mujeres de al-Ándalus (2000), Carlos Cano: un juglar de Granada (2000), Otra vez la Edad Media: anómicos y desamparados (2008), Un soplo de luz (2008), Música sefardí: itinerarios, textos y trabajos (2008), Identidades religiosas y convivencia (2017), Ibn Gabirol: maldito judío (2017), etc.

Firme defensor de los Derechos Humanos y, particularmente, de los inmigrantes y desplazados, forma parte, como patrono, de la Fundación Sevilla Acoge, siendo, a su vez, miembro del Instituto de Estudios Transnacionales, miembro, como vocal, del Foro Andaluz de la Inmigración, miembro de honor de la Asociación Internacional Otras Memorias, presidente de la Asociación Andaluza de Documentalistas y de la Asociación de Derechos Humanos de Andalucía, así como participante en múltiples iniciativas culturales, desde la revista El Secreto del Olivo, como miembro de su consejo editor en 2012, a la fundación del grupo de música sefardí Aljama en 1999. Sebastián de la Obra Sierra está en posesión del premio Andalucía-Concordia en 1997, otorgado por la Federación de Colectivos de Inmigrantes de Andalucía, del premio Derechos Humanos en 2006, concedido por la asociación sevillana La Voz del Inmigrante, y del premio Igualdad en 2013, por la Federación de Migrantes de la Unión Europea en Andalucía.

Un texto de Sebastián de la Obra

«¿Cuál es la mejor forma de conocer?: ejerciendo la memoria. Saber por qué somos lo que decimos ser y saber cómo hemos construido lo que somos.

No hablo de una memoria conmemorativa y monumental. No hablo de una memoria que oculta la verdad (una verdadera contradicción). Hablo de una memoria que facilita conocer el itinerario.

Verdad y justicia (y también perdón) son los elementos que permiten trazar una línea de diálogo en el horizonte. Bajo estas consideraciones debo reconocer que solo tengo confianza en el diálogo, entre quienes sienten curiosidad».

De Identidades religiosas y convivencia.

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